Cómo utilizar la gamificación para mejorar el comportamiento de los conductores
El uso de técnicas de gamificación en la gestión de su flota puede ayudar a mejorar en gran medida el comportamiento de los conductores. Esto no sólo ahorra combustible y dinero, sino que también aumenta la seguridad de los vehículos y los empleados.
Haciendo el camino para mejorar el comportamiento de los conductores
El comportamiento de los conductores influye mucho en los resultados finales de la flota de una compañía. Si los conductores tienden a manejar su vehículo agresivamente, con aceleraciones y frenadas repentinas, si dejan el motor inactivo, o si superan constantemente los límites de velocidad, todos esos comportamientos se verán en las cuentas finales de la flota. Por eso es tan importante educar a los conductores en el uso de la seguridad vial y las prácticas de ahorro. Pero las técnicas tradicionales de entrenamiento ya no son tan eficientes. Si este es su caso, puede incorporar la técnica de gamificación a su equipo y crear una flota más segura y eficiente.
La gamificación no es más que usar reglas y aspectos como juegos en entornos que no son juegos. Estos aspectos pueden ser narración, competencia, puntuación o psicología del juego, entre otros, y todos ellos están dirigidos a mejorar el comportamiento de los conductores. De esta manera buscamos potenciar el comportamiento del jugador en los empleados. Ese comportamiento es lo que los animará a competir entre sí ya ganar el premio previamente establecido. Además, el comportamiento del jugador estimula la capacidad de aprendizaje, la creatividad, la interacción o el compromiso. Y al final del día, un trabajador contratado es un trabajador eficiente.
Cómo introducir la gamificación en su gestión diaria de la flota
Hay muchas maneras de introducir técnicas de gamificación en su gestión de flotas para mejorar el comportamiento de los conductores. Algunos serán más útiles que otros y es importante probar diferentes estrategias y elegir la más eficiente. Por ejemplo, puede crear una liga de ahorro de combustible. Cada conductor registra sus resultados en forma de puntos durante una temporada preestablecida. Al final del mes, el semestre o el año, se comparan los resultados y se anuncia un ganador, quien será el conductor que haya ahorrado más combustible.
Otra forma de mejorar el comportamiento de los conductores es recompensar a los empleados cuando toman medidas positivas y no sólo castigarlos cuando cometen acciones negativas. Por lo tanto, si un conductor no ha tenido un accidente en un año entero, se le puede dar un sueldo más un regalo físico.
Otra forma de mejorar el comportamiento de los conductores es establecer una meta y animar a los empleados a competir para ver quién alcanza la meta más rápido. De esta manera se les anima a ejecutar mejor su trabajo día a día, en un modelo más parecido al maratón que al sprint. Además, las técnicas de gamificación permiten controlar el comportamiento de los conductores sin que se sientan observados o piensen que el administrador de la flota interfiere en su trabajo.
Como puede ver, la gamificación puede ser muy útil para ayudar a los conductores a mejorar su comportamiento. Mientras compiten y ganan premios, aprenden a actuar favorablemente a la empresa. Las técnicas de gamificación se pueden aplicar a todos los aspectos de una empresa para mejorar los resultados y el rendimiento final.